"Un bodegón, también conocido como naturaleza muerta, es una obra de arte que representa objetos inanimados, generalmente extraídos de la vida cotidiana, que pueden ser naturales (animales, frutas, flores, comida, plantas, rocas o conchas) o hechos por el hombre (utensilios de cocina, de mesa o de casa, antigüedades, libros, joyas, monedas, pipas, etc.) en un espacio determinado. Esta rama de la pintura se sirve normalmente del diseño, el cromatismo y la iluminación para producir un efecto de serenidad, bienestar y armonía"... (Vía wikipedia)
En el siglo XX, a través de la fotografía, el bodegón se convierte en el formato más utilizado para la presentación de objetos y productos en la publicidad. Hoy quiero presentaros el trabajo de una estilista de interiores que me ha llamado la atención, ella es Hilary Robertson.
En el siglo XX, a través de la fotografía, el bodegón se convierte en el formato más utilizado para la presentación de objetos y productos en la publicidad. Hoy quiero presentaros el trabajo de una estilista de interiores que me ha llamado la atención, ella es Hilary Robertson.
El estilista de interiores es el que en el ámbito de la decoración, diseña, crea y construye el "bodegón" que luego fotografía el fotógrafo.
Cuando vi el trabajo de Hilary Robertson, me sorprendió y me gustó. Me pareció que rompía con los cánones del estilismo de interiores que marcan unas directrices estrictas, según las cuales todo tiene que respirar un perfecto orden, creando unos ambientes artificiales y poco cálidos.
En el trabajo de Hilary veo imperfección, veo espontaneidad, naturalidad. Juega con los elementos, se divierte, no tiene miedo de mezclar. Pero no es caótica, es elegante, refinada, cuida la composición y transmite sensaciones, logra crear un feeling. Utiliza tonos amables, aun cuando utiliza colores oscuros; materiales nobles como la cerámica, el hierro o la madera, creando una atmósfera que nos hace sentir a gusto con lo que vemos. Consigue generar una armonía que me gusta mucho. Se nota que también es coleccionista de antigüedades vintage, simpre presentes en sus estilismos.
Aquí tenéis algunas fotos de sus estilismos, disfrutarlas...
Vía: www.hilaryrobertson.com
Cuando vi el trabajo de Hilary Robertson, me sorprendió y me gustó. Me pareció que rompía con los cánones del estilismo de interiores que marcan unas directrices estrictas, según las cuales todo tiene que respirar un perfecto orden, creando unos ambientes artificiales y poco cálidos.
En el trabajo de Hilary veo imperfección, veo espontaneidad, naturalidad. Juega con los elementos, se divierte, no tiene miedo de mezclar. Pero no es caótica, es elegante, refinada, cuida la composición y transmite sensaciones, logra crear un feeling. Utiliza tonos amables, aun cuando utiliza colores oscuros; materiales nobles como la cerámica, el hierro o la madera, creando una atmósfera que nos hace sentir a gusto con lo que vemos. Consigue generar una armonía que me gusta mucho. Se nota que también es coleccionista de antigüedades vintage, simpre presentes en sus estilismos.
Aquí tenéis algunas fotos de sus estilismos, disfrutarlas...
Vía: www.hilaryrobertson.com
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